Regalo

Inacabado

Vuelves como las noches.
Eres igual a una puesta de sol
o un reloj con diferentes diferentes horas de nuevo.
Vuelves con olores azules y a color
enteramente beso.
Vuelves inesperadamente golondrina
con manos que apagan incendios.
Ya no hay rosas con dientes.
Ni nada que temer…

 

 

(FALTA POEMA… a ti te dejo que lo termines, sin ninguna premisa, sin ninguna instrucción, sin paracaídas. Ama y escribe)

 

Mi amiga Mel lo continuó así:

 

Vuelves como los días ardientes, sin lluvia,
como el desierto en el que caminé sollozando,
en este reloj de arena que pasa de un lado a otro mi pena,
Y me ofreces, solo eso, ¿un beso?
Vuelves con esperanzas, con la vida rota, angustiado,
a mis manos de seda buscando reposo,
y aquí, sin condición, está mi pecho para refugiarte…

 

 

 

 

Cine

Sentado en la pupila diana

un animal cine entra en ti.

A través de la luz,

así se abre paso

por la quietud de la noche

a escala ojo.

Y entras en trance.

Y por arriba florecen estrellas eléctricas.

Y el amado.

Y la amada.

Frente a frente  amarados

parecen despacio.

 

Primer Plano: Ella cierra los ojos

                     y va plegando fronteras.

 

Plano General: Unos gorriones se juntan

                      con unos cuervos en el jardín.

 

Plano Próximo: Él echa a volar en forma de rayo.

 

Primer Plano: Ella suave huele a jazmín

                     a cámara lenta

                     todo el cine.

 

 

Poema de El libro rojo

Imitación a la alegría

En mi pueblo

a las dos de la tarde

(todos los viernes)

frente a la puerta del Ayuntamiento

los gorriones y las palomas

vienen a comer entre pétalos de rosa.

Es una danza ritual

de silencio

interrumpida solo

por su picoteo leve…

algún gorrión protesta y pía

-a veces-

y se va volando

para luego, otra vez, el silencio

-como de nieve-

Qué serena y queda está la plaza ahora

y hace tan poco

la alegría

de la gente gritando:

-¡Vivan los novios!

-¡Vivan las novias!

novias

El beso

Edvard_Munch_-El beso

Versión sobre capítulo 7 de Rayuela de Julio Cortazar

mi boca te dibuja

como por primera vez

entreabierta

y cerrar los ojos

deshacerlo todo

boca deseo boca

mi mano

te dibuja y busco sostener

por un azar

el aire que sonríe que se escapa

de mi boca a la tuya

y se encuentran

y  luchan

y se mordiéndose

apenas la lengua

jugando a unir el aire y el silencio

entonces hundirse

lentamente

suave en tu pelo mientras

las flores los peces los movimientos de las mareas oscuras

-es vértigo profundo-

y mordemos

y ahogamos

en un breve y terrible

beso

El beso Klimt -Tamman Azzam

Imagen 1: El beso de Edvard Munch
Imagen 2: El beso de Gustav Klimt en las ruinas de Alepo por Tamman Azzam

Negativo

negativo

Ventana, puerta, habitación…

quiero decir, el espacio cóncavo del cuenco.

La materia negra entre las estrellas.

Los huecos

que dejan las hojas en el árbol como

una foto en negativo.

Vacío de infinitas posibilidades

del no-existir.

Imagina: una flor así de grande.

Imagina: un universo de síes.

Lugares por donde no pasan caminos

son

caminos a cualquier lugar.

Las no-palabras que no te supe decir.

El amor que por amor dejé pasar

durará siempre.

50 años

SAN PEDRO

Estaba en una bolsa azul

junto a un contenedor de basura

y asomaba un brazo –no te asustes-

como pidiendo ayuda.

Era un corazón de peluche rojo

con unos ojos grandes

y una sonrisa grande

y dos palabras grandes

escritas en el pecho

que decían “te quiero”.

Viéndolo allí tirado

como otro juguete roto

me dio por pensar si

al amor

siempre le pasará eso.

Pero luego,

unas calles más tarde,

recordé a mis padres

-después de cincuenta años casados-

paseando todavía

cogidos de la mano.

 

 

Dedicado a mis padres que hoy habrían hecho 52 años casados.

Autocomplétame 2.0

Lo.

Lo que escondían sus ojos.

Lo imposible.

Lo mejor de mí.

Lo mejor de nuestras vidas.

Lo que me gusta de ti

y me gustaría decirte.

Lo que la verdad importa

y el viento se llevó.

Lo que el viento se llevó   – es tu película favorita-

El viento.

El viento se levanta.

El viento en los sauces, en otoño, en Cádiz.

El viento en las nubes.

Lo que mueve las nubes.

El viento.

Lo que mueve el mundo.

Lo que mueve el voto americano –es incógnita como tú-

Lo que mueve mi vida.

Mi vida.

Mi vida extra.

Mi vida eres tú.

Tú.

Tú tan bonita.

Tú, tan lejos.

Tan solo.

Solo.

Solo un segundo.

Solo un segundo tú y yo

tú y yo –otra vez-.

Solo amor.

Amor.

Amor y dolor.

Amor eterno.

Eterno retorno.

Eterno resplandor de una mente sin recuerdos  -es mi película favorita-

y que nunca te olvida.

Eterno retorno

a ti.

A ti tan bonita.

A ti tan lejos.

A ti mujer.

A ti mujer poema.

Poema

que se autocompleta

contigo.

Autores: Autocompletar Google y un servidor.

Juntas

Ella le peinaba las cejas

mientras le hablaba.

Ella, llegadas a un punto

de la conversación, la abrazó.

Hablaban de

las compras de Reyes que otra vez

les había tocado -a ellas-

hacer.

Llevaban las dos anillos

de la misma marca o

de la misma forma, no sé.

(un delfín).

Estaban juntas, muy juntas

-como esos anillos al dedo-

sentadas en el metro.

Y reían ¡Cómo reían!

Ella calzaba unos zapatos

de piel con tacón cuadrado.

Ella

unas zapatillas deportivas.

Trascendental

tragaluz-para-la-luz-inversa

Es Amor

más allá

mucho más allá

que se oculta tan profundamente universo

en la sencillez radical de (la metáfora búscala tú)

 

                                               Método de trabajo

                                       Escucha varias veces

                                       la imagen

                                       de un mundo hacia dentro.

                                       Imagina – nunca dejes de imaginar-

                                       dos espejos enfrentados

                                       y tú y yo y tú y yo en ellos

                                       ProyectadosConfundidos

                                      en un infinito juntos.

 

Mientras, en algún lugar

las partes constitutivas y prácticas

se quedan aquí.

Quiero decir, la demostración

científica

de que existe. Se queda aquí.

(Los necios sólo verán

huellas en el espejo)

Así, la entrega absoluta

se extiende

desde el batir del corazón

-de quien se enamora la primera vez-

hasta la visión fugaz

de los mártires. Hilos

son hilos

que se cruzan y entrecruzan

y repiten hilos:

Acto I:

                Sacrificio y muerte.

Acto II:

               La luz se abate

               y cae

               cae

               sobre los amantes.

Acto III:

              Desintegración

              en un mundo que trasciende.

 

Collage: Luis María Ortega Chamarro
Poema: Manuel Alonso

Cuando despertamos y decidimos que es pronto y hacemos el amor y nos volvemos a quedar dormidos.

                              insondable flor

                              abeja alocada

                              acuarela

                              de sed

                              que se lanza

                              y sube

                              y respira

                              mi cuerpo

                              que aletea

                              como una sombra

                              después

                              escucha entonces escucha

                              tus manos

                              tu pulso entonces

                              mientras te veo dormir

                              somos un sueño

                              un abrazo

                              una nube

                              que se aleja

                              delicada

 

Cristal

cristal

En el umbral

con los brazos en cruz

y tus lágrimas en un ánfora seca;

me saludaste con una mano

y leí que ya

era demasiado tarde.

Me quedé en el otro lado de la acera.

Me quedé recordando.

Me quedé en el cristal del aeropuerto

donde pusimos nuestras manos sin tocarnos.

Y reímos y lloramos y dijimos ser

golondrinas que vuelven.

Sin embargo la niebla y tus

silencios de porcelana

(había muerto tu madre

y nunca lo supe)

Y mis alaridos de martillo

que desesperados

te llamaban

rompieron el templo de cristal

que construimos en el aire

aquel verano.